Ahora sabemos que nuestra mente está en capacidad para imaginar lo positivo y lo negativo, o lo que deseemos, todo depende de lo que alimentemos nuestro cerebro, de lo cual dependerá nuestro éxito o nuestra derrota en la vida, incluso se puede crear necesidades inexistentes.
Un ejemplo de ello, lo pude apreciar en una película de fútbol americano, en el cual un entrenador de este deporte, tomó las riendas de un equipo, que estaba acostumbrado a perder, y él a través de darle confianza a sus jugadores y demostrarles que si podían, hizo que pudieran campeonar en su campeonato estatal, el cual empezó con un hecho que me quedó grabado en mi ojo mental, el cual consistió en que su jugador más importante tenía que andar “en cuatro patas”, cargando a otro jugador y avanzar lo que más podía y por lo general, lo hacía hasta un máximo de 50 metros, y cargando un jugador de 70 Kgrs. de peso, y le dijo su entrenador que si podía cargar 70 metros y le dijo que le era imposible; así que, el entrenador le dijo que lo haría con los ojos vendados, pero tenía que dar su máximo esfuerzo y creen en si que si podía, y todo ello a vista de los demás jugadores, que estimaban tal proeza como imposible; así que el entrenador, en vez ponerle uno de 70 Kgrs. de peso, puso uno de 80 Kgrs. y en vez de 70 metros, programó 100 metros, sin que él lo supiera, mas si se daban cuenta los demás jugadores observadores, y durante todo el trayecto lo iba alentando que diera su máximo esfuerzo y que faltaba muy poco, que diera un esfuerzo adicional y así fue que pudo cargar los 100 metros y los 80 Kgrs., y en ese momento le quitó la venda de los ojos y pudo observar lo que realmente había cargado y recorrido, y desde ese momento todo el equipo cogió una confianza mayor y no se detuvo hasta obtener el campeonato.
En esta prueba, que lo imposible a veces no es tal, son solo bloqueos mentales que nosotros mismos nos los ponemos, y que todos estamos en capacidad de aprender a eliminar esos obstáculos mentales y para eso tenemos que cambiar nuestra manera de enfrentar los problemas o los retos que nos da la vida, aunque en un principio te de miedo, pues es natural tenerlo al ir por un rumbo no acostumbrado, no conocido. El primer paso es creer en ti mismo, en tus posibilidades de éxito, y que los obstáculos están ahí para superarlos, para crecer en nuestro desarrollo personal y en nuestra felicidad. Si actúas así te aseguramos que obtendrás un éxito rotundo, que no habrá sueño que no puedas alcanzar. Luego tienes que alimentar tu mente de pensamientos positivos, para que te vuelvas en un ganador, que el ser un triunfador se haga una costumbre, y para ello tienes que convertir que tu pensamiento positivo se convierta en un hábito, sean parte de nuestro yo interior, de nuestro pensamiento subconsciente, donde puedan tener estabilidad y actuar de manera instintiva, guiándonos en nuestras acciones.
Los obstáculos y las adversidades, están allí para ser vencidos, son los que les da sabor a la vida, son los que condimentan nuestro alimento espiritual, sin ellos no habría superación personal, no habría crecimiento individual, es allí donde se ven a los grandes. Así no enseña la historia denominada: “La mariposa”, el cual se ve claramente la importancia de los obstáculos en la vida para nuestra superación personal:
“Un hombre encontró un capullo de una mariposa y se lo llevó a casa para poder ver a la mariposa cuando saliera del capullo”.
“Un día vio que había un pequeño orificio y entonces se sentó a observar por varias horas, viendo que la mariposa luchaba por abrirlo mas grande y poder salir”.
“El hombre vio que la mariposa forcejeaba duramente para poder pasar su cuerpo a través del pequeño agujero, hasta que llegó un momento en el que pareció haber cesado de forcejear, pues aparentemente no progresaba en su intento”.
“Parecía que se había atascado. Entonces el hombre, en su bondad, decidió ayudar a la mariposa y con una pequeña tijera cortó al lado del agujero para hacerlo más grande y ahí fue que por fin la mariposa pudo salir del capullo. Sin embargo, al salir la mariposa tenía un cuerpo muy hinchado y unas alas pequeñas y dobladas”.
“El hombre continuó observando, pues esperaba que en cualquier instante las alas se desdoblarían y crecerían lo suficiente para soportar al cuerpo, el cual se contraería al reducir lo hinchado que estaba”.
“Ninguna de las dos situaciones sucedieron y la mariposa solamente podía arrastrarse en círculos con su cuerpecito hinchado y sus alas dobladas. Nunca pudo llegar a volar”.
“Lo que el hombre en su bondad y apuro no entendió, fue que la restricción de la apertura del capullo y la lucha requerida por la mariposa, para salir por el diminuto agujero, era la forma en que la naturaleza forzaba fluidos del cuerpo de la mariposa hacia sus alas, para que estuviesen grandes y fuertes y luego pudiese volar”.
“La libertad y el volar solamente podían llegar luego de la lucha. Al privar a la mariposa de la lucha, también le fue privada su salud”.
“Algunas veces las luchas son lo que necesitamos en la vida. Si la naturaleza nos permitiese progresar por nuestras vidas sin obstáculos, nos convertiría en inválidos. No podríamos crecer y ser tan fuertes como podríamos haberlo sido”.
“Cuánta verdad hay en esto! Cuántas veces hemos querido tomar el camino corto para salir de dificultades, tomando esas tijeras y recortando el esfuerzo para poder ser libres”.
“Necesitamos recordar que nunca recibimos más de lo que podemos soportar y que a través de nuestros esfuerzos y caídas, somos fortalecidos así como el oro es refinado con el fuego”.
“Nunca permitamos que las cosas que no podemos tener, o que no tenemos, o que no debamos tener, interrumpan nuestro gozo de las cosas que tenemos y podemos tener. Nunca pensemos ni nos enfoquemos en lo que no tenemos, disfrutemos cada instante de cada día por lo que tenemos y nos ha sido dado!!!”.
